La vida del Psicólogo Damián Díaz es el reflejo de una filosofía que hoy aplica en su clínica: transformar los retos en motores de cambio. Desde sus inicios humildes en una constructora y su paso por el sector educativo mal pagado, Damián decidió emprender y crear Psicoclínica DDZ, un espacio donde la empatía y los resultados tangibles guían cada terapia. Esta visión, basada en su propia superación, lo lleva a abordar temas sensibles y profundos, como el de la soledad que enfrentan nuestros adultos mayores.
En el revistazo, conversamos con el experto sobre un fenómeno que se esconde en muchos hogares: la soledad en adultos mayores no es siempre por falta de compañía, sino por la dolorosa falta de ser escuchados. Este artículo es una colaboración con el Psicólogo Damián Díaz para abrir una conversación crucial sobre cómo podemos revalorar y reincorporar la voz de quienes nos dieron la vida y la experiencia.
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La paradoja de la soledad en adultos mayores con compañía
Envejecer trae consigo cambios que van más allá de lo físico, afectando profundamente la esfera emocional y social. El adulto mayor en el hogar familiar a menudo experimenta una dolorosa paradoja: la soledad en adultos mayores rodeados de sus seres queridos. Como el Psicólogo Damián Díaz nos explica, «Ya no es la ausencia de personas alrededor, sino la sensación de ser invisibles, de que sus palabras ya no importan, de que su voz se apaga poco a poco.»
Esta soledad no es la objetiva de quien vive solo, sino la soledad emocional, la que surge de la falta de conexión y reconocimiento dentro de la dinámica familiar. Estudios sobre la soledad en adultos mayores indican que entre el 20% y el 40% de la población mayor de 65 años experimenta algún nivel de soledad no deseada, y esta sensación está fuertemente ligada a la percepción de tener poco apoyo social.

El silencio que duele y el riesgo de la depresión
El Psicólogo Damián Díaz destaca que el problema inicia en las dinámicas cotidianas que invisibilizan al adulto mayor: «Con frecuencia escucho frases como: ‘Mi papá repite lo mismo de siempre’, ‘Mi abuela ya no entiende los tiempos de ahora’ o ‘Mi mamá habla, pero sus temas no me interesan’.»
Para el revistazo, estas expresiones son más que frases comunes, pues reflejan cómo los miembros más jóvenes de la familia dejan de practicar la escucha activa y genuina, lo que se convierte en un motor de soledad en adultos mayores. La consecuencia, según el experto, es clara: aislamiento emocional.
«El abuelo o la abuela, que antes era el centro de la familia, ahora guarda silencio porque siente que incomoda. Y en ese silencio, aparece la tristeza, la sensación de inutilidad y, muchas veces, la depresión,» nos compartió el Psicólogo Damián Díaz.
Investigaciones en el campo de la salud mental asocian directamente la soledad en adultos mayores y el aislamiento social con un mayor riesgo de padecer depresión, ansiedad y deterioro cognitivo. La sensación de inutilidad que genera la falta de escucha, de no ser un aporte valorado, es un factor de riesgo que puede minar la salud integral de la persona.
Hijos y nietos ¿dónde queda la gratitud?
El reto de la escucha activa se manifiesta de forma distinta en cada generación, pero el efecto en el adulto mayor es el mismo: sentirse desplazado.
La prisa de los hijos y la incomprensión
Los hijos, inmersos en sus responsabilidades laborales y familiares, a menudo caen en la trampa de la impaciencia. En palabras del Psicólogo Damián Díaz: «Olvidar que algún día ellos nos dieron tiempo, consejos y cuidados es también olvidar la raíz de lo que somos. Escuchar a un padre mayor no es solo un acto de respeto, es un acto de gratitud y de amor.»
El revistazo considera que el ritmo de vida actual nos hace priorizar la productividad sobre la conexión humana, lo cual es especialmente dañino cuando se trata del vínculo familiar. La soledad en adultos mayores puede ser el costo de esta prisa.
La brecha generacional de los nietos
Para los nietos, la brecha generacional es una barrera que debe cruzarse con empatía. El Psicólogo Damián Díaz nos recuerda que «detrás de cada historia [de los abuelos] hay un intento de transmitir identidad, valores y experiencia. Cuando los nietos no escuchan, no solo pierden al abuelo: pierden la oportunidad de conectar con sus raíces y con la sabiduría de la familia.»
Es vital entender que el adulto mayor no busca dar una clase de historia; busca reafirmar su existencia y su legado. Su voz es un tesoro de experiencia que combate la soledad en adultos mayores y enriquece la identidad familiar.
La incomodidad y la búsqueda de pertenencia
Otro punto crucial que abordó el experto es la percepción de la «imprudencia» en los comentarios de los mayores. «Muchos adultos mayores expresan opiniones que a veces suenan incómodas o directas. No siempre es imprudencia; en muchas ocasiones es la última manera que encuentran de seguir siendo parte de la conversación. No buscan incomodar, buscan ser vistos,» señala el Psicólogo Damián Díaz.
Esta búsqueda de ser vistos es una manifestación de su necesidad de pertenencia. Cuando se sienten ignorados o que sus aportes son trivializados, recurren a la crítica o a la opinión directa como un intento desesperado de captar la atención.
Acciones de la familia para combatir la soledad en adultos mayores
El antídoto para la soledad en adultos mayores es la escucha activa y el tiempo de calidad. El Psicólogo Damián Díaz nos ofrece una guía práctica y sencilla para reajustar la dinámica familiar:
- Tiempo de calidad: «Dedicar al menos unos minutos al día para preguntarles cómo están y escuchar con atención,» nos aconseja el psicólogo. Esos minutos deben ser sin distracciones.
- Validación emocional: Evite minimizar sus preocupaciones. «Mejor decir: ‘entiendo que eso te preocupe’, en lugar de frases como ‘ya no pienses en eso’,» sugiere el experto. La validación es el reconocimiento de su sentir.
- Integración en actividades: El revistazo recomienda incluir al adulto mayor en decisiones sencillas o en la preparación de eventos familiares. Su rol debe ser activo.
- Escucha activa sin celular: Como nos compartió el Psicólogo Damián Díaz, «No interrumpir ni mirar el celular mientras hablan. Mirarlos a los ojos es también decirles: ‘me importas’.» Este es quizás el gesto más poderoso de conexión.
- Espacios de pertenencia: Motivar que compartan sus talentos con los nietos (cocina, manualidades, anécdotas de vida). Darles un rol de maestro eleva su autoestima y combate la sensación de inutilidad.
Un cierre necesario el valor de la atención
La soledad en adultos mayores es una crisis de atención que podemos resolver desde casa. No se trata de cuántas personas hay alrededor, sino de la calidad de la conexión que ofrecemos.
«La soledad de los adultos mayores no siempre se debe a la falta de personas, sino a la falta de escucha,» resume el Psicólogo Damián Díaz. Como hijos y nietos, tenemos la oportunidad de regalarles nuestra atención, tiempo y respeto.
Y como bien concluye el Psicólogo Damián Díaz: «Un día, si tenemos la fortuna de llegar a viejos, desearemos que alguien también nos escuche con paciencia y amor.»

Comparte tu experiencia y conéctate con el experto
¿Sientes que este artículo te toca de cerca? ¿Cómo has logrado mantener la conexión con los adultos mayores de tu familia? Te invitamos a compartir tu historia y tus consejos en la sección de comentarios. ¡El Psicólogo Damián Díaz estará feliz de leer tus puntos de vista y enriquecer esta conversación!
Si necesitas acompañamiento profesional o quieres saber más sobre el enfoque terapéutico basado en la empatía y los resultados, puedes contactar al Psicólogo Damián Díaz en:
- Clínica: Psicoclínica DDZ
- Teléfono (Empresa): +52 961 109 9198
- Correo electrónico: psic.damiandiaz@outlook.com
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4 comentarios en “Soledad en adultos mayores y la ausencia.”
Este tema es doloroso pero real. Trabajo con adultos mayores y lo veo cada día: rodeados de gente, pero emocionalmente solos. La guía práctica que da el psicólogo es oro puro. Especialmente lo de escuchar sin celular, algo tan simple y tan olvidado. Muy buen contenido, ojalá más personas se tomen en serio la salud emocional de los mayores.
Me encantó la claridad con la que el Psicólogo Damián explica algo tan cotidiano pero tan ignorado. La parte de los nietos me llegó… soy muy cercana a mi abuela, pero a veces no entiendo sus opiniones o las siento “fuera de lugar”. Qué importante saber que no es imprudencia, sino un intento de pertenecer. Este artículo debería leerse en todas las familias.
La reflexión sobre la prisa de los hijos me pegó fuerte. Yo trabajo todo el día y confieso que muchas veces no tengo paciencia cuando mi mamá quiere contarme cosas del pasado. Ahora veo que para ella es su forma de mantenerse conectada. Me emocionó mucho este artículo y ya hasta quiero platicar más con ella hoy mismo.
Qué artículo tan necesario. Me hizo pensar en mi abuelita, que vive con nosotros, pero aun así siempre dice que se siente sola. Yo pensaba que era exageración, pero ahora entiendo que no es falta de compañía, sino falta de escucha real. Me quedo con esa frase del psicólogo: “ser vistos”. A veces se nos olvida que ellos también sienten, también necesitan ser escuchados.