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La sexualidad en el adulto mayor no caduca mitos, realidades y el derecho a un erotismo pleno
En México solemos asociar la sexualidad con juventud, vitalidad y cuerpos que responden a la inmediatez del deseo. La publicidad, el cine y hasta el discurso médico refuerzan la idea de que el erotismo pertenece casi en exclusiva a quienes están en la flor de la edad.
Sin embargo, como nos explica el Psicólogo Andrei Urosa, experto en salud sexual y mental, la realidad es muy distinta: la sexualidad en el adulto mayor no desaparece con los años, sino que se transforma, adquiere nuevos matices y, en muchos casos, puede incluso enriquecerse con la experiencia, la intimidad y el autoconocimiento.
Pese a ello, hablar de la sexualidad en el adulto mayor sigue siendo un tabú arraigado. La sociedad mexicana, marcada por el prejuicio y el machismo, tiende a invisibilizar el deseo en esta etapa. Cuando pensamos en los adultos mayores, solemos imaginar fragilidad o dependencia, pero raras veces placer, ternura o erotismo. Esto no solo limita la conversación pública, sino que también impacta de manera directa en el bienestar de millones de personas que, en silencio, continúan sintiendo y buscando formas de vivir su intimidad.
La sexualidad en el adulto mayor, entendida más allá de lo genital, es parte de la identidad humana. Acariciar, besar, sentir excitación, disfrutar del contacto y expresar afecto son manifestaciones de ella. Así, relegar a los adultos mayores a un supuesto estado de asexualidad no solo es falso, como demuestra la evidencia, sino cruel, pues les niega un derecho humano fundamental y contribuye a la soledad que ya enfrentan muchos en esta etapa de la vida.
Este artículo, en colaboración con el Psicólogo Andrei Urosa, busca abrir la conversación sobre la sexualidad en el adulto mayor en México, explorando mitos, realidades, los retos culturales que influyen en este tema y cómo la sexología puede acompañar procesos vitales donde el erotismo y la intimidad deben seguir teniendo un lugar.
Mitos que silencian el deseo en el adulto mayor
El silencio en torno a la sexualidad en el adulto mayor se construye sobre una base de mitos culturales muy resistentes. Estos prejuicios actúan como una barrera que impide a las personas mayores vivir su deseo con libertad y buscar ayuda profesional cuando la necesitan.
La vejez es asexual y el deseo desaparece
«Nada más lejos de la verdad. La sexualidad no desaparece por cumplir cierta edad. Lo que cambia son las formas en que se experimenta,» nos aclara el Psicólogo Andrei Urosa.
Aunque la intensidad del impulso sexual puede ajustarse por cambios biológicos, el deseo está íntimamente ligado a lo emocional y relacional. Como nos compartió el especialista, «el deseo también depende de la calidad de la relación de pareja, del estado de salud mental, de la autoestima y de la capacidad de reinventar la intimidad.»
De hecho, la investigación complementaria del revistazo confirma que este mito de la sexualidad en el adulto mayor es erróneo. Múltiples estudios han demostrado que una parte significativa de las personas mayores de 65 años siguen teniendo actividad sexual de manera regular, entendida como todo acto erótico, afectivo y de intimidad. Sin embargo, un estudio realizado en Hidalgo, México, reveló que más del 56% de los adultos mayores presenta actitudes negativas hacia la sexualidad en la vejez, demostrando que el principal obstáculo no es biológico, sino cultural.
El cuerpo ya no es capaz de sentir placer
Es innegable que el cuerpo cambia. La lubricación vaginal puede disminuir, y las erecciones pueden requerir mayor estimulación y tiempo de recuperación. Pero, en palabras del Psicólogo Andrei Urosa, «todo ello no equivale a imposibilidad. A menudo, son los prejuicios y la falta de información lo que limita más que el cuerpo en sí.»
El placer sigue siendo posible porque el cuerpo no deja de ser capaz de sentir. El reto para la sexualidad en el adulto mayor no es recuperar la juventud, sino adaptarse. Con el acompañamiento médico adecuado, recursos sexológicos y una comunicación abierta, la respuesta erótica sigue presente.
El sexo en la vejez es ridículo o indecente
Este es quizás el prejuicio cultural más dañino, especialmente en México, donde, según el experto, «todavía es común escuchar burlas cuando se habla de personas mayores expresando afecto en público.» Se asocia la vejez con una supuesta pérdida de dignidad erótica.
El Psicólogo Andrei Urosa es enfático: la sexualidad en el adulto mayor no tiene fecha de caducidad, y descalificarla refleja más la incomodidad social con el paso del tiempo que una realidad del deseo. El erotismo a los 70 u 80 años es tan válido y hermoso como a cualquier otra edad.
La biología de la transformación es la claves para una sexualidad plena
Hablar de la sexualidad en el adulto mayor implica reconocer los cambios biológicos, pero, como subraya el Psicólogo Andrei Urosa, «cambio no es sinónimo de pérdida total. La sexualidad es una dimensión plástica y flexible, que se adapta a lo largo de la vida.»
Hombres a disfunción eréctil y el muro de la vergüenza
En los varones, el enfoque se centra en la erección. La disminución gradual de testosterona con la edad puede afectar el deseo y la rigidez. «Es común que las erecciones requieran más tiempo o mayor estimulación, y el tiempo de recuperación tras el orgasmo suele alargarse,» explica el Psicólogo Andrei Urosa.
El desafío principal, sin embargo, es emocional. «Algunos hombres interpretan estos cambios como un fracaso o un signo de que ‘ya no sirven'», nos comparte el especialista. Esta percepción lleva a muchos a evitar acudir al médico por vergüenza, agravando el problema. En el revistazo encontramos que esta vergüenza es un factor determinante en que la disfunción eréctil se subdiagnostique.
El Psicólogo Andrei Urosa enfatiza que la solución pasa por dos vías:
- Reajuste: Explorar nuevas formas de intimidad, como caricias prolongadas, juegos previos más largos o prácticas que no giren únicamente en torno a la penetración.
- Atención Médica: Un chequeo oportuno con un especialista es vital, ya que la disfunción eréctil puede ser un síntoma de un problema médico subyacente más serio, como enfermedades cardiovasculares.
Mujeres menopausia, lubricación y una nueva libertad
En las mujeres, la menopausia marca un punto de inflexión. El cese de producción de estrógenos puede generar sequedad vaginal y, en algunos casos, dolor durante el coito.
Pero el Psicólogo Andrei Urosa también ve la parte positiva en la sexualidad en el adulto mayor femenino: «Muchas mujeres reportan que, tras la menopausia, sienten una libertad renovada: ya no existe la preocupación por un embarazo no deseado, y pueden vivir su deseo con menos presiones.»
La sexualidad en el adulto mayor femenino es una sexualidad que se libera de la reproducción. La exploración corporal, la estimulación del clítoris y la creatividad erótica permiten mantener una vida sexual plena. El obstáculo es, una vez más, cultural. «En México, muchas mujeres creen que hablar de estos temas es indecoroso, o incluso se resignan pensando que el placer ‘ya no les toca’. Romper este silencio es fundamental,» concluye el especialista.
Los desafíos ocultos, riesgos e impacto emocional
La falta de información sobre la sexualidad en el adulto mayor no solo afecta la calidad de vida, sino que también genera riesgos.
Infecciones de transmisión sexual (ITS)
Un error frecuente es pensar que, al no existir riesgo de embarazo, la sexualidad en el adulto mayor queda libre de precauciones. Sin embargo, la incidencia de ITS, incluido el VIH, ha crecido en la última década en este grupo etario.
«Esto se debe a la falta de uso de métodos de protección y a la ausencia de educación sexual para este grupo,» asegura el Psicólogo Andrei Urosa. El revistazo encontró que la información sobre prevención de ITS rara vez se dirige a las personas mayores, lo que las deja vulnerables al iniciar nuevas relaciones, especialmente tras una viudez o un divorcio.
Viudez, soledad y autoconocimiento en la madurez
La sexualidad en el adulto mayor se ve atravesada por fuertes cambios emocionales: viudez, divorcio, enfermedades crónicas o jubilación. Estos pueden afectar la autoestima y generar sentimientos de soledad o inutilidad.
Un hombre jubilado que siente haber perdido un lugar de reconocimiento social o una mujer viuda que experimenta culpa al pensar en otra pareja son ejemplos de cómo «la sexualidad se ve teñida por emociones no resueltas,» explica el Psicólogo Andrei Urosa.
La clave, para el experto, es el autoconocimiento. «Reconocer lo que gusta, explorar nuevas formas de estimulación, cuidar la salud emocional y aceptar los cambios del cuerpo permite resignificar la sexualidad.» El erotismo no se extingue: se transforma en un espacio de mayor autenticidad y ternura, libre de las ansiedades de rendimiento de la juventud.
La historia del psicólogo Andrei Urosa
Conexión, Migración y Sexualidad
La visión sensible y multicultural del especialista se forja en su propia experiencia de vida, lo que le permite entender las complejidades de la sexualidad en el adulto mayor en el contexto latinoamericano.
«Soy venezolano, emigrante a España y que conseguí el amor en una mexicana que me trajo a sus tierras, donde me sigo desarrollando personal y profesionalmente,» nos compartió el Psicólogo Andrei Urosa.
Esta trayectoria personal enriquece su práctica, permitiéndole abordar el erotismo desde una perspectiva que honra la diversidad de experiencias y la necesidad de adaptar el diálogo sobre la sexualidad a las diferentes realidades culturales, como la mexicana.
La sexualidad en el adulto mayor es un derecho y una dimensión humana que merece ser vivida con plenitud, sin estigmas ni vergüenza. El principal trabajo es derrumbar los mitos culturales que la silencian y animar a las personas mayores a buscar información y apoyo profesional.
Si tú o alguien que conoces necesita acompañamiento para vivir una sexualidad en el adulto mayor más plena, no duden en contactar a un especialista.
Sigue la conversación
¿Qué piensas sobre la sexualidad en el adulto mayor? ¿Conocías estos mitos?
Te invitamos a dejar tus comentarios y a compartir este artículo para seguir rompiendo el tabú. El Psicólogo Andrei Urosa estará encantado de leer sus opiniones y de dar su punto de vista en la sección de comentarios.
Explora más en el revistazo:
- Interlinking: [Descubre cómo la terapia de pareja ayuda a redescubrir la intimidad después de la jubilación].
- Interlinking: [Lee sobre los tabúes de salud mental que afectan a los hombres en México].
Pero el Psicólogo Andrei Urosa también ve la parte positiva en la sexualidad en el adulto mayor femenino: «Muchas mujeres reportan que, tras la menopausia, sienten una libertad renovada: ya no existe la preocupación por un embarazo no deseado, y pueden vivir su deseo con menos presiones.»
La sexualidad en el adulto mayor femenino es una sexualidad que se libera de la reproducción. La exploración corporal, la estimulación del clítoris y la creatividad erótica permiten mantener una vida sexual plena. El obstáculo es, una vez más, cultural. «En México, muchas mujeres creen que hablar de estos temas es indecoroso, o incluso se resignan pensando que el placer ‘ya no les toca’. Romper este silencio es fundamental,» concluye el especialista.
Los desafíos ocultos y sus riesgos e impacto emocional
La falta de información sobre la sexualidad en el adulto mayor no solo afecta la calidad de vida, sino que también genera riesgos.
Infecciones de transmisión sexual (ITS)
Un error frecuente es pensar que, al no existir riesgo de embarazo, la sexualidad en el adulto mayor queda libre de precauciones. Sin embargo, la incidencia de ITS, incluido el VIH, ha crecido en la última década en este grupo etario.
«Esto se debe a la falta de uso de métodos de protección y a la ausencia de educación sexual para este grupo,» asegura el Psicólogo Andrei Urosa. El revistazo encontró que la información sobre prevención de ITS rara vez se dirige a las personas mayores, lo que las deja vulnerables al iniciar nuevas relaciones, especialmente tras una viudez o un divorcio.
Viudez, soledad y autoconocimiento en la madurez
La sexualidad en el adulto mayor se ve atravesada por fuertes cambios emocionales: viudez, divorcio, enfermedades crónicas o jubilación. Estos pueden afectar la autoestima y generar sentimientos de soledad o inutilidad.
Un hombre jubilado que siente haber perdido un lugar de reconocimiento social o una mujer viuda que experimenta culpa al pensar en otra pareja son ejemplos de cómo «la sexualidad se ve teñida por emociones no resueltas,» explica el Psicólogo Andrei Urosa.
La clave, para el experto, es el autoconocimiento. «Reconocer lo que gusta, explorar nuevas formas de estimulación, cuidar la salud emocional y aceptar los cambios del cuerpo permite resignificar la sexualidad.» El erotismo no se extingue: se transforma en un espacio de mayor autenticidad y ternura, libre de las ansiedades de rendimiento de la juventud.
Conexión, migración y sexualidad
La visión sensible y multicultural del especialista se forja en su propia experiencia de vida, lo que le permite entender las complejidades de la sexualidad en el adulto mayor en el contexto latinoamericano.
«Soy venezolano, emigrante a España y que conseguí el amor en una mexicana que me trajo a sus tierras, donde me sigo desarrollando personal y profesionalmente,» nos compartió el Psicólogo Andrei Urosa.
Esta trayectoria personal enriquece su práctica, permitiéndole abordar el erotismo desde una perspectiva que honra la diversidad de experiencias y la necesidad de adaptar el diálogo sobre la sexualidad a las diferentes realidades culturales, como la mexicana.
Conclusión y llamado a la acción
La sexualidad en el adulto mayor es un derecho y una dimensión humana que merece ser vivida con plenitud, sin estigmas ni vergüenza. El principal trabajo es derrumbar los mitos culturales que la silencian y animar a las personas mayores a buscar información y apoyo profesional.
Si tú o alguien que conoces necesita acompañamiento para vivir una sexualidad en el adulto mayor más plena, no duden en contactar a un especialista.
Sigue la conversación
¿Qué piensas sobre la sexualidad en el adulto mayor? ¿Conocías estos mitos?
Te invitamos a dejar tus comentarios y a compartir este artículo para seguir rompiendo el tabú. El Psicólogo Andrei Urosa estará encantado de leer sus opiniones y de dar su punto de vista en la sección de comentarios.
- Psicólogo Andrei Urosa
- Sitio Web: psicologoandreiurosa.com
- Correo electrónico: andreiurosa@gmail.com
- Teléfono de la empresa: +52 55 1962 1234
- Facebook: https://www.facebook.com/saludmentalencdmx/
- Instagram: https://www.instagram.com/saludsexualymental/
4 comentarios en “La sexualidad en el adulto mayor”
Lo que más me impactó es cómo el artículo muestra el daño del prejuicio social. Ver el sexo en la vejez como ridículo es algo que escuché toda mi vida, y ahora me doy cuenta de lo cruel que es. La experiencia del Psicólogo Andrei, además de su propia historia migrante, le da una sensibilidad muy especial al tema. Ya lo seguí en Instagram, tiene mucho valor lo que comparte.
Wow… no sabía que las ITS habían aumentado en adultos mayores. Pensaba que este grupo estaba “protegido”, pero tiene toda la lógica si casi no se les da educación sexual. Me abrió los ojos. La parte sobre la viudez y el autoconocimiento también me pareció súper profunda. Este artículo derriba mitos con mucha empatía y evidencia. Muy bueno.
Como adulto mayor, agradezco profundamente que se hable de esto sin morbo y sin tabúes. Muchos creemos que ya “no nos toca” disfrutar, pero es más por la cultura y la vergüenza que por el cuerpo. Y es real lo que dice el especialista: el placer sigue ahí, solo que de otra forma. Excelente contenido, muy respetuoso y educativo.
Qué tema tan necesario y tan poco hablado. Me encantó cómo el Psicólogo Andrei explica que la sexualidad no desaparece, solo cambia. En mi familia siempre se ha visto este tema como algo “inapropiado” para los mayores, pero este artículo me hizo ver lo injusto que es negarles ese derecho. Gracias por abrir la conversación con tanta sensibilidad.