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La Revolución Silenciosa ¿Por qué los «Divorcios Grises» están Redefiniendo el Amor en la Vejez?
Durante décadas, la imagen de la pareja que envejece junta, «hasta que la muerte los separe», fue un ideal inquebrantable en México y Latinoamérica. Sin embargo, una revolución silenciosa está reescribiendo esta narrativa: los llamados divorcios grises. Este término, que se refiere a las separaciones que ocurren después de los 50 o 60 años, rompe con la tradición y pone en el centro la búsqueda de la autonomía y la felicidad personal en la vejez.
En el revistazo profundizamos en este fenómeno con la perspectiva experta del Licenciado Elizeth Altamirano López, psicólogo con especialidad en Psicogerontología y Master en Gerontología Social. Juntos exploramos las causas, repercusiones y el proceso emocional detrás de la decisión de terminar un matrimonio de larga duración en la etapa dorada.
Divorcios Grises Más Allá del Adiós una Cuestión de Transformación Vital
El concepto de divorcios grises fue acuñado por investigadoras del National Center for Family & Marriage Research de EE. UU. (Brown y Lin, 2012) al detectar un aumento notable en las rupturas de matrimonios de larga duración, a menudo de más de dos décadas, cuando los hijos ya son adultos y la rutina compartida pierde su sentido afectivo.
Como nos explica el psicogerontólogo Altamirano, en México, este fenómeno de los divorcios grises también está en ascenso. El INEGI (2023) reporta que, aunque aún es un porcentaje menor, el grupo de 60 años y más representa una proporción creciente de los divorcios. Este dato es un espejo de un cambio cultural profundo:
«Desde la perspectiva gerontológica, el divorcio gris no responde solo a conflictos de pareja, sino a procesos de transformación vital. En esta etapa, la jubilación, la partida de los hijos (Síndrome del Nido Vacío) o la reflexión sobre la propia vida despiertan preguntas como: ‘¿Quiero seguir así los años que me quedan?'»
El divorcio gris, visto desde la Gerontología Social, es un acto de reajuste de roles donde la resiliencia y el envejecimiento activo cobran una importancia vital. Dejar de ver estos divorcios grises como un fracaso y entenderlos como una estrategia de adaptación ante el malestar crónico o la «soledad convivida» es clave.

Las Causas que Impulsan los Divorcios Grises en la Madurez
La decisión de un divorcio gris no es trivial y suele ser el resultado de una acumulación de factores a lo largo del tiempo. En palabras de Elizeth Altamirano, las causas más frecuentes detrás de los divorcios grises giran en torno a la necesidad de recuperar la autonomía:
- Deseo de autonomía emocional y personal: La necesidad de vivir la vida bajo las propias reglas, sin el peso de las expectativas de la pareja.
- Agotamiento del rol de cuidado: Especialmente en mujeres que han sostenido por años las tareas domésticas y familiares.
- Pérdida de comunicación o intimidad: Una rutina que ha erosionado el vínculo afectivo.
- Diferencias en el ritmo de envejecimiento, salud o intereses: El tiempo revela caminos separados.
El experto complementa: «El envejecimiento también es un momento de revisión biográfica: las personas mayores repiensan su historia afectiva y, a veces, eligen reescribirla. Estos divorcios grises son una manifestación de esa elección».
El Dilema de los Divorcios Grises Entre el Duelo y el Redescubrimiento Personal
Vivir un divorcio gris implica, sin duda, un profundo duelo. Se pierde no solo a la pareja, sino una vida compartida, una identidad social y un proyecto de futuro. Sin embargo, el psicogerontólogo Altamirano nos recuerda que hay una doble cara en la moneda de los divorcios grises.
«En consulta, los divorcios grises suelen presentarse con ambivalencia afectiva: tristeza y alivio, miedo y esperanza, culpa y liberación. El duelo no solo es por la persona, sino por la historia compartida y la identidad de pareja.»
Mientras que en el revistazo observamos que estudios (como el de Dykstra, 2015) han señalado que las mujeres mayores suelen mostrar una notable capacidad de resiliencia tras la separación, experimentando una sensación de libertad y redescubrimiento, los hombres pueden enfrentar un mayor riesgo de aislamiento emocional.

Los Divorcios Grises en el Contexto Mexicano
El fenómeno del divorcio gris en México se potencia por factores sociales como el incremento de la educación y participación laboral femenina, que fortalece la independencia económica, y el replanteamiento de los roles tradicionales que antes obligaban a permanecer juntos «por deber o por los hijos».
El divorcio gris transforma la identidad: la persona pasa de verse como parte de un «nosotros» a reconocerse como un «yo» en una nueva etapa vital, libre de cargas.
¿Cómo Afrontar un Divorcio Gris? Recomendaciones de la Psicogerontología
La separación en la vejez tiene repercusiones más existenciales y emocionales que en parejas jóvenes, pues se da en una etapa donde las metas de vida ya no se centran en rehacer una familia o carrera, sino en mantener propósito, autonomía y equilibrio emocional. Abordar un divorcio gris requiere una perspectiva integral.
El psicogerontólogo Elizeth Altamirano nos ofrece las siguientes estrategias para acompañar este complejo proceso:
Fortalecer la Identidad Individual
Después de años de vida en pareja, la identidad puede sentirse fusionada con la del otro. Como Elizeth Altamirano nos compartió, una tarea central es reconstruir el «yo» personal: «Reconocer gustos, proyectos, amistades y formas de estar en el mundo propias. Esto se trabaja con ejercicios de autoconocimiento, narrativas de vida o biografía terapéutica».
Validar el Duelo sin Minimizarlo
El divorcio gris es una pérdida múltiple (pareja, rutina, rol social). Es crucial permitir y legitimar el dolor, reconociendo que no hay una «edad correcta» para sufrir. El proceso terapéutico debe integrar la historia, la edad, el cuerpo y la red social de la persona para evitar duelos prolongados, depresión o deterioro funcional.
Reestructurar Creencias Limitantes
En la consulta, el experto escucha frases como: «a mi edad ya no tiene sentido empezar de nuevo» o «ya no sirvo para estar sola». En palabras de Altamirano, es fundamental cuestionar esas creencias y reemplazarlas por narrativas más realistas y esperanzadoras, trabajando con pensamientos compasivos y flexibles que ayuden a reconstruir una autoimagen sana.
Re-significar la Vida y Crear Nuevos Proyectos
Una vez elaborada la pérdida del divorcio gris, el objetivo es reconstruir un sentido vital. El especialista en Gerontología Social recomienda:
«Se puede trabajar con ejercicios de propósito, metas pequeñas o proyectos simbólicos (arte, viajes, servicio comunitario). El mensaje terapéutico central es: aún hay tiempo para disfrutar, crear y amar, aunque sea de otra manera.»
Envejecer es Decidir Vivir con Dignidad y Libertad
El divorcio gris nos recuerda que la vejez no es un final, sino una etapa de decisiones profundas y conscientes. Separarse a esta edad puede doler, pero también es un camino hacia una vida más auténtica, que prioriza la calidad de vida y el bienestar emocional.

Como concluye el psicogerontólogo Altamirano, este proceso se trata de una reafirmación del yo: «Quienes se atreven a romper con lo que ya no los hace felices no renuncian al amor, sino que reivindican la posibilidad de amarse a sí mismos, incluso en el ocaso de la vida».
En el revistazo, celebramos estas nuevas narrativas que afirman que envejecer no es rendirse ante el tiempo, sino elegir cómo habitarlo.
Contacto y Participación
Si estás atravesando un proceso de divorcio gris o tienes dudas sobre cómo abordar la separación en la vejez, puedes contactar al experto Elizeth Altamirano López:
- Teléfono: 55-27-28-26-30
- Red Social: @Gerontointegral
- Correo electrónico: psicorock@hotmail.com
¡Te Invitamos a Participar!
¿Tú o algún familiar ha vivido un divorcio gris? ¿Qué ha sido lo más difícil o lo más liberador de esta experiencia? ¡Queremos leer tu historia! Deja tus comentarios y preguntas abajo. El psicogerontólogo Elizeth Altamirano López estará atento a la sección para poder compartir su punto de vista experto y apoyar la conversación. Además, te invitamos a explorar otros artículos de el revistazo sobre salud emocional en la madurez y transformación familiar para seguir profundizando en estos temas vitales.













4 comentarios en “Divorcios Grises”
Sinceramente no estoy de acuerdo. Creo que a esa edad se debe tener mas paciencia y resiliencia para mantener a la familia unida. El divorcio siempre deja cicatrices en los hijos aunque ya sean adultos y pos se pierde la estabilidad de años. Es mi opinion ♂️
Muy interesante el punto de vista del Dr. Altamirano. Yo me pregunto como afecta esto al patrimonio familiar en Mexico?? porq a esa edad dividir bienes o la pension puede ser un golpe muy duro economicamente. Hay algun especialista que recomienden para ver la parte legal de estos divorcios grises? Me interesa saber mas sobre el ajuste de roles que mencionan.
@Ricardo Arreola tienes toda la razon!! Yo pase por eso hace dos años y la parte de los bienes fue un caos total . Me gustaria que el revistazo sacara una nota sobre los derechos legales en la vejez porque uno se siente muy perdido. Por cierto, excelente recomendacion del Dr. Elizeth, voy a buscarla en su red social porque lo de la ‘identidad fusionada’ me cayo como anillo al dedo.
Que articulo tan valiente. Mi hermana se separó a los 64 años despues de 40 de casada y todos en la familia la juzgaron muchisimo, decian que ya para que a esa edad. Pero ahora la veo mas joven que nunca, viaja y va a sus clases de pintura. Me encanto lo que dice el doctor sobre que no es un fracaso sino una adaptacion… a veces la soledad acompañada es lo peor que hay. Saludos!